Islas Baleares

La “Red de vigilancia de les praderas de Posidonia oceanica en Baleares” es un proyecto que dirige y coordina el Servicio de Recursos Marinos de la D.G. de Medi Rural i Marí del Govern de les Illes Balears. Comenzó el año 2002 enmarcado en dos proyectos europeos, “Monitoring & Managing of European Seagrass Ecosystems” (abreviatura M&MS) y el proyecto LIFE-POSIDÒNIA “Protección de Praderas de Posidonia en LICs de Baleares”. Además el desarrollo de este proyecto ha seguido el ejemplo de otras redes similares que se han realizado satisfactoriamente en España y en otros países. Es un proyecto que principalmente pretende valorar el estado de las praderas de Posidonia oceanica para que sirvan de indicador del estado de los sistemas marinos bentónicos costeros de Baleares.

La Red de vigilancia se basa en el seguimiento periódico de una serie de estaciones de muestreo fijas, en las cuales se controlarán una serie de parámetros ambientales propios de las praderas y de calidad ambiental de la zona. Las estaciones son unidades de referencia, donde se repite periódicamente la toma de medidas en el mismo sitio y en las mismas  condiciones. Los datos obtenidos a lo largo del tiempo, permiten disponer de una secuencia histórica suficientemente extensa, como para tener una idea del estado de las praderas y en general de nuestros fondos. Con el tiempo la red se convertirá en una herramienta útil que permitirá saber cómo evolucionan las praderas a lo largo del tiempo.

Otra de las bases en las que se asienta el proyecto es la implicación social. La sociedad balear posee una elevada sensibilidad hacia el medio ambiente, y en particular está muy concienciada sobre la importancia que tiene el preservar las praderas de Posidonia oceanica. La Red de vigilancia de las praderas canaliza esta voluntad de participación implicándoles en el proyecto.
Así, la Red es de hecho una red de buceadores voluntarios que ofrece la oportunidad para que las instituciones y todos aquellos grupos voluntarios que quieran participar, colaboren juntos en un proyecto común en la importante y difícil labor de conservar en buen estado nuestros fondos. El trabajo de los voluntarios y su implicación es básico para la consecución del proyecto, necesaria por la elevada extensión de las praderas que hay en Baleares.

UNA RED DE ISLAS

En la actualidad la Red de Posidonia cuenta con 35 estaciones instaladas en diferentes puntos de  todas las islas de Baleares. Las primeras estaciones se instalaron el año 2002 en Mallorca, en 2003 se instalarion las primeras en Ibiza y Formentera, y Menorca se unió al seguimiento en 2004. En Menorca el seguimiento de las estaciones lo lleva a cabo el OBSAM (Observatori Socioambiental de Menorca) del Consell de Menorca, que comenzó el seguimiento de las praderas de Posidonia en 2001, como parte del seguimiento ambiental que realiza Menorca como Reserva de la Biosfera. A partir de 2004 se incluyó este seguimiento dentro de la Red de Posidonia, y comenzó una colaboración muy estrecha entre el OBSAM y la DGMRM para llevar a cabo juntos este ambicioso proyecto común. En este caso, el seguimiento de las estaciones, se realiza básicamente por el personal técnico de ambas instituciones, y de forma ocasional también colaboran en el seguimiento, buceadores voluntarios.

En Ibiza y Formentera el seguimiento de las estaciones las coordina la DGMRM, como en Mallorca. En la mayoría de estas estaciones el seguimiento se realiza mediante la ayuda de buceadores voluntarios, clubes y centros de buceo.

OBJETIVOS

Objetivo Global: Determinar el estado de salud de les praderas de P. oceanica a escala regional para diseñar políticas de gestión efectivas para la preservación de este valioso hábitat.

Objetivos específicos:

  • Evaluar el estado de las praderas de Posidonia oceanica en las Islas Baleares y su evolución en el tiempo.
  • Establecer una red de estaciones de seguimiento permanente mediante la ayuda de buceadores voluntarios.
  • Identificación de indicadores tempranos del declive de las praderas como herramienta útil para la detección de cambios en la pradera a través del tiempo.
  • Proporcionar información fiable que permita establecer medidas de control y gestión, que aseguren la permanencia de este valioso hábitat en el tiempo.
  • Sensibilizar activamente a todos aquellos sectores sociales implicados directamente con el medio marino, para que conozcan la importancia de conservar las praderas para el mantenimiento del equilibrio biológico i la biodiversidad mediterránea.

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